¡Que descubrimiento! Por fin un pan que me gusta.

Como ya os he comentado en alguna ocasión  no soy nada panera, he probado mil panes sin gluten, y a no ser que los chamusque en la tostadora, no me gustan nada. Ni siquiera el pan hecho en casa con la panificadora, y os prometo que he probado casi todas las recetas de vuestros blog…

Se me hace bola y me dan arcadas, lo sé es algo exagerado, pero es que creo que tengo un rechazo psicológico al pan aunque sea sin gluten.

Por eso cuando como en un restaurante apto para celiacos y me preguntan si me traen pan sin gluten, automáticamente me sale un no rotundo, normalmente me insisten en que es sin gluten y que no me preocupes, entonces me veo obligada a aclararles que no me gusta nada.

Después de negarme 800 veces a probarlo, un día decidí arriesgarme cuando fui a Danicola y lo pedí, más que nada porque te lo ponen calentito y con aceitito para que untes, y tiene una pinta… y efectivamente, para mi sorpresa ¡¡me encanto!!

Por fin había encontrado un pan que no se me hacia bola.

Me comentaron, que era de Schär en concreto de su Marca de congelados DS como os podéis imaginar lo he estado buscando por todos los lados. En el festival del celiaco pregunte en el stand de Schär por el pan del Danicola, y me dijeron que lo vendían en Hipercor.

Así que aproveche que fui hacer las compras navideñas y en la zona sin gluten lo encontré.

Vienen 6 panecillos y creo recordar que me costó 4 € (es que compre más cosas)

Esta espectacular!!

Ahora tengo un problema que antes no me tenia, me hincho comiendo pan y cuando llega la comida no tengo hambre. Un problema absurdo, pero que para mí es algo novedoso; así que ahora estoy aprendiendo a no atiborrarme para tener hueco para la comida normal.